Una serie fotográfica nos ofrece un panorama sin precedentes sobre la desolada zona de exclusión en las inmediaciones del reactor nuclear de Fukushima, donde amplias áreas de suelo radiactivo cubiertas por una densa vegetación “engullen” los rastros de la civilización humana.
La zona de exclusión, que se extiende por unos 20 km alrededor del reactor nuclear, ahora asemeja a las escenas postapocalípticas de la serie “The Walking Dead“. Los habitantes de este lugar dejaron a merced de la naturaleza automóviles, casas, escuelas, bibliotecas, supermercados y prácticamente todo lo que tenían después del aviso sobre los elevados y peligrosos niveles de radiactividad.El accidente nuclear llevó a la evacuación de 160 mil personas, la mayoría de las cuales aún no puede retornar a estar áreas y algunas zonas se consideran tan peligrosas que ni siquiera se permite el ingreso. Pese a esto, el gobierno nipón anunció recientemente que planea liberar algunas ciudades, esencialmente las más distantes a la central nuclear de Fukushima.
Arkadiusz Podniesinski es un fotógrafo de 43 años originario de Polonia que visitó Fukushima para ver los efectos del desastre con sus propios ojos.
“Mi objetivo era mostrar el estado real de la zona de exclusión. Namie, Futaba y Tomioka son ciudades fantasmas, con espacios vacíos que resultan aterrorizantes al mostrar una tragedia que afectó a cientos de miles de personas”, declaró Podniesinski.
Tras un gran terremoto el 11 de marzo de 2011, tres de los reactores de la central nuclear de Fukushima fueron desactivados tras la amenaza de un tsunami de 15 metros. En los días posteriores a la tragedia los tres núcleos se habían derretido, y en total cuatro reactores se vieron afectados. Cuando los residentes y trabajadores fueron obligados por las autoridades japonesas a abandonar sus casas, dejaron todo atrás. Los supermercados todavía exhiben los productos en los estantes, en los pizarrones de las escuelas todavía puede verse la clase del día y los automóviles fueron abandonados en las carreteras y las calles.