Heather Tookey gastó cinco mil libras esterlinas para llevarse un cachorro de guepardo llamado Lagrimita en una “reserva de guepardos” de África, donde todos los animales en el futuro acaban convirtiéndose en trofeos de caza para clientes ricos.
Heather organizó una recaudación de fondos para salvar a estos felinos. Así logró comprar a todos los cachorros del lugar para trasladarlos a reservas naturales. También encontró un nuevo amigo inusual y, sobre todo, muy cariñoso.