Esta puerta a la que no querrías volver después de unas cervezas.
Esta pesadilla de azulejos.
Esta entrada estilo Indiana Jones.
Este baño no tan privado.
Esta cerradura con trampa explosiva.
Esta nevera flotante.
Esta puerta a ninguna parte.
Esta salida peligrosa.
Y este escape igualmente aterrador.
Estos mosaicos desencadenantes.
Esta escalera dividida.
Y esta rampa de montaña rusa.
Esta puerta descentrada.
Y este muro que simplemente no está del todo bien.
Este pasamanos que funciona como candado.
Estos urinarios que son poderosos cerca.
Esta puerta de seguridad que… no es tan segura.
Estos baños no tan privados.
Esta puerta flotante.
Esta cama incómoda.
Este mosaico increíblemente perezoso.
Esta puerta de seguridad sin sentido.
Y por último estos urinarios que hacen de la orina un espectáculo.